Historia del Ayuntamiento

Publicado: 5 mayo, 2015 en Ayuntamiento
Etiquetas:

Fuente: El Postigo de Tías
Por Juan Cruz Sepúlveda

Historia del AyuntamientoAlmacenes

El municipio de Tías no contó con una sede propia y en exclusiva para su ayuntamiento hasta casi 200 años después de su constitución. Fue un 5 de julio de 1799 cuando, a petición de los vecinos del lugar, se concedió a Tías la licencia para nombrar anualmente alcalde real, diputado y personero, y se procede a la segregación de Tías del ayuntamiento de Teguise, según informe de la Real Audiencia de Las Palmas. El pago de Tías ya disponía de parroquia propia desde tres años antes.

De los escasos datos que se disponen desde la creación del ayuntamiento, la casa consistorial ha pasado por varias ubicaciones, siempre ligadas a los propietarios del momento, fundamentalmente los beneficiados por los repartimientos de 1735. Era habitual que la casa consistorial estuviera ubicada en el domicilio del alcalde o del secretario, e incluso en doble sede por esa razón, y también en los mismos locales habilitados para escuelas.

Hay constancia de su paso por una casa en Las Claras, siendo alcalde Rafael Ferrer Alvarado. Luego, en el Camino de San Bartolomé, en la casa de Antonio Bermúdez, y, más tarde, se conocen varios emplazamientos localizados en la Carretera General: en El Pavón, en los almacenes de Gabriel Díaz Monfort, en la casa de M. Figuera, en la casa de Santiago Rodríguez Borges (siendo alcalde Servando Calero Mesa, en 1913). La última sede de la Casa Consistorial en las proximidades de la Carretera General fue en la casa de doña Escolástica Fuentes Gutiérrez. Esta casa, desaparecida con la ampliación de la Avenida Central, compartía paredes medianeras con la tienda de Antonio Valiente y la casa de Lorenzo el secretario. Situada por el este, la Casa Consistorial, con vistas a Arrecife, disponía de cuatro habitaciones y altillo con amplios ventanales y pisos de madera. Aquí, la actividad como Ayuntamiento permaneció durante una larga temporada hasta que la amenaza de su estado ruinoso aconsejó su traslado a la conocida como Casa del Perenquenal, en los tiempos del alcalde Antonio Díaz Bermúdez, a principios de los años sesenta.

La Casa del Perenquenal formaba parte de un pequeño cortijo, con terrenos, aljibe y era de trilla. El último medianero que pasó por la misma fue Melquiades Hernández.casas En 1926, siendo alcalde el maestro de Mácher, Carlos Fránquiz Gil, la casa fue adquirida. En un pleno de octubre de ese año, el alcalde manifestó que se le había propuesto la compra de una casa situada en El Perenquenal, propiedad del vecino de Arrecife don José Díaz Santana, cuyo valor ascendía a 8.000 pesetas pagaderas de la siguiente forma: dos mil pesetas a la entrega de la escritura, y las seis mil restantes en el plazo de tres años a razón de dos mil pesetas cada año, quedando la finca hipotecada durante las tres anualidades. Aunque la operación de la compra se materializó, no dejó de estar exenta de polémica, ya que, en el mismo pleno, el secretario don Sixto Suárez Topham había presentado otra propuesta para la compra de otro inmueble, con el aval de las firmas de varios vecinos.

La inversión propuesta por el alcalde prosperó con grandes esfuerzos presupuestarios y el mismo regidor dictaminó un impuesto sobre la pipa de vino recogido para poder afrontar esta primera inversión en patrimonio de la Corporación Municipal. Pese a que el inmueble fue adquirido para su funcionamien- to como casa consistorial, las necesidades del pueblo obligaron a que entre 1926 y 1977 funcionara como un edificio de usos múltiples. Entre sus paredes se compartieron actividades diversas como las tareas propias del Ayuntamiento, del colegio, del juzgado de paz, cuartelillo policial, dispensario médico, etc. La necesidad de disponer de una casa Consistorial propia abre otro episodio en la década de los sesenta.

En un pleno de septiembre de 1964, siendo alcalde Antonio Díaz Bermúdez, se acuerda comprar un solar, propiedad de Honorato Bermúdez Mesa, de 450 m² junto a la Carretera General, por un valor de 15.700 pesetas, para que albergara la construcción de una casa consistorial. En la documentación administrativa se informa de los requisitos que ha de tener el nuevo edificio municipal: “ha de tener dos plantas y un gran aljibe para el servicio; planta baja o principal, que llevará salón de sesiones, despacho de alcaldía, secretarías, oficinas municipales, archivo y servicios sanitarios. En la planta alta se han de contemplar tres viviendas. La fachada principal debe dar frente a la plaza de la Iglesia parroquial”. El proyecto no se llegó a ejecutar y en ese lugar se construiría más tarde el ambulatorio médico, donde luego se ubicó Servicios Sociales, al realizarse a pocos metros el nuevo Centro de Salud.

Por tanto, la actividad municipal continuó hasta 1977 en la Casa del Perenquenal, hasta que en ese año, con la entrada en funcionamiento del colegio Alcalde Rafael Cedrés, el municipio de Tías contó al fin con un edificio en exclusiva para la actividad administrativa del Ayuntamiento. Es por eso que a partir de entonces se emprenden varias modificaciones y ampliaciones de las instalaciones. Esta casa ha sido testigo de los cambios estructurales de un pueblo que pasó de ser eminentemente agrario a ser el precursor del sector turístico. La vieja Casa Consistorial acogió los numerosos cambios que trajo la llegada de la Democracia, y, también, el espectacular incremento poblacional, en gran medida por la cantidad de extranjeros que eligen el municipio como lugar de residencia.

El crecimiento demográfico, la demanda de nuevos servicios y el incremento de trabajadores hace necesario habilitar y construir nuevos departamentos externos a mediados de lAyuntamiento-2a década de los noventa. Este es el caso del Departamento de Cultura, en el que su salón de actos, denominado Indieras, es utilizado durante varios años como sede de los plenos munici pales. La dispersión de las dependencias municipales obligó a proyectar un edificio de Ayuntamiento proporcionado con las nuevas dimensiones del municipio. El problema no se resolvió con facilidad y surgieron muchas dudas y discrepancias en el proceso. Primeramente, se recurrió a un concurso de ideas para la ampliación de la antigua Casa Consistorial, se falla y acaba en maqueta en exposición, pero no llega a ejecutarse. En 1999 se convierte en una prioridad la reforma, ampliación o construcción de la nueva sede y, finalmente, se opta por sustituir el viejo edificio por uno nuevo que mantiene la referencia del anterior tan sólo en su fachada. La decisión fue duramente criticada por quienes pensaron que era una decisión más sensata conservar el antiguo edificio y construir el nuevo Ayuntamiento en otro emplazamiento, con plena libertad arquitectónica, con el sello del siglo XXI, que permitiera una mejor adaptación a las necesidades de los nuevos tiempos. Muchos vecinos y representantes políticos lamentaron la pérdida de un edificio del siglo XIX, que estaba protegido por las Normas Subsidiarias vigentes en aquel momento. Durante el periodo de construcción del nuevo Ayuntamiento, la actividad principal de la primera institución municipal se situó en unas instalaciones privadas de la calle Libertad, conocidas como la casa de Ignacio. Polémicas aparte, el nuevo edificio ha venido a mejorar las condiciones laborales de los funcionarios del Ayuntamiento y la calidad de la atención a los vecinos.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s