Fuente: El Postigo de Tías
Por Juan Cruz Sepúlveda
El vínculo de Benigno con la música guarda una estrecha relación con la iglesia de La Candelaria, de la cual se ha hecho valedor y guardián, y donde ha dedicado sus mayores esfuerzos. Desde pequeño disfrutó del valor de este arte con el padre de Lázaro, Juan Martín, que era organista de la iglesia, siendo cura don Teodoro. Benigno, a indicaciones del cura, optó por ir a Arrecife para recibir clases de solfeo y piano en casa de Antoñita Cabrera, en la calle Real.
Acudía dos veces en semana y el traslado lo hacía a pie, dos horas para abajo y dos para arriba. El resto del tiempo practicaba en el órgano de la iglesia, de una forma autodidacta. Pasó muchas horas encerrado en la iglesia de día, por la noche, e incluso de madrugada, sin más compañía que “los santos por un lado y los muertos del cementerio por otro”.
A la muerte de Juan Martín, en 1951, ocupó el puesto de organista para acompañar con el armonio en las misas cantadas y concelebradas, adquiriendo matices especiales precisamente en las fiestas de la Virgen de La Candelaria. Posteriormente, Benigno fundó dos agrupaciones folklóricas locales a partir de 1964, primero una de mayores con cuerpo de baile, y otra de pequeños. Ha sido un gran impulsor del tradicional rancho de pascua de Tías, rescatando oralmente temas de Pepe Bermúdez. Después de los sesenta, con la vuelta a la permisividad de la música dentro de la iglesia, prohibida en el 1942 por el obispo Pildaín, se produce un fortalecimiento de esta modalidad en los tradicionales nacimientos y Auto de los Reyes Magos.
Otra creación destacada que llevó el sello de este insigne vecino fue la Banda Municipal de Música en 1984, pese a las reticencias iniciales de las instituciones. En ese año del estreno, la Banda no pudo realizar el acompañamiento de la procesión, ya que un habitual de la zona, el viento, soplaba con tanta fuerza que sólo les permitió tocar junto al trono en la puerta de la iglesia.
Benigno ha visto reconfortado la continuidad de su obra en las buenas dotes que transmitió a sus hijos, uno de los cuales se ha convertido en uno de los pocos directores de orquesta nacidos en las islas, mientras que el otro ejerce como profesor de la Escuela Municipal de Música. Por último, señalar el momento importante que le supuso a Benigno el homenaje público impulsado por la Agrupación Musical El Pavón, reconociéndole la labor desarrollada en la difusión de la música popular y el aprendizaje de la misma, en el marco del III Encuentro de Música Popular El Pavón en 1999.