Fuente: «Reseñas sobre educación del municipio de Tías»
Por: José Juan Romero Cruz y Juan Cruz Sepúlveda
Llegan los años posteriores a la guerra. El presupuesto del Ayuntamiento apenas llega a las cuarenta mil pesetas. En diciembre de 1943 se habla de «… situación de insolvencia, urge poner remedio a esta angustiosa situación…». En otro pleno del mismo mes se acuerda “…comprar un décimo de la Lotería Nacional, el 34.881, cubriéndolo del gasto de imprevistos…».
En marzo del 44 se da cuenta de que: «… la plaza de este Ayuntamiento donde están enclavadas las oficinas y dos casas escuelas con salones para niños y niñas existiendo un depósito para agua que por efecto de no estar arreglada la expresada plaza no se pueden aprovechar sus aguas, se acuerda proceder al arreglo…». Posteriormente se acuerda: «… continuar el trabajo de la zanja para los retretes de niños y niñas de las escuelas de este pueblo así como la limpieza del aljibe…».
En La Tiñosa las escuelas están instaladas en casa de D. Rafael Cabrera Padrón, donde son maestros D. Santiago y Doña Antonia Henríquez, aunque poco después se comenta los cierres de esta escuela por la ausencia de maestros.
Sin embargo, las escuelas de Mácher se consolidan con la presencia ininterrumpida del maestro D. Jesús Corchero Martín, de origen extremeño, quien ostentaría también la alcaldía del Municipio desde 1938 al 48. Este maestro instauró las clases de adultos por las tardes-noche, y así, cuando las labores del campo lo permitían, se juntaba un grupo de mayores. Cierto día, el maestro mantuvo una fuerte discusión con el vecino del Volcán, D. Pablo Aparicio, al mostrarle una esfera y comentarle que el mundo era redondo y giraba. D. Pablo le replicaba que «… la puerta de su casa siempre la había conocido mirando para el naciente…». El vecino después de aquel desengaño no quiso volver al aula.
Los acuerdos de 1931 parecen retomarse en un pleno de junio de 1948, donde se señala: «… la actual escasez de viviendas así como de locales apropiados para la instalación de escuelas en los pagos de Mácher y La Tiñosa, urge buscar una solución conducente a la instalación decorosa de las referidas escuelas que en otro caso se corre el riesgo de su desaparición (…) en que se adquiera por el municipio en sitios estratégicos unos solares para sobre los mismos construir los edificios apropiados a tal fin. Que esas construcciones pudieran llevarse a efecto mediante concierto con el Instituto de la Vivienda y ayuda de los vecinos si éstos voluntariamente o por medio de prestación personal si ello fuese exigible…, para ello se ha hablado con los herederos de Pereyra en Mácher y con D. Marcial Tomás Cabrera Padrón en La Tiñosa al precio de cien pesetas cada solar…».
(APAT 3-6-1948)