Fuente: Curandería y cancionero lanzaroteños
Por Jesús Mª Godoy Pérez
CURA
Se aplica, especialmente, a los niños con la columna vertebral partida. Y es una cura ritual. (55)
Día de San Juan Bautista, al amanecer. Los padres del «niño quebrado» avisan a dos parejas: dos Juanes y dos Marías. Una de las parejas elige una caña bien enraimada, la raja por la mitad sin arrancarla, y enlaza el extremo superior con una cinta; rito que realiza generalmente una de las Marías mientras su Juan permanece pasivo frente a ella, de modo que la caña quede en medio.
Entonces, María toma en brazos al niño quebrado, y Juan le pregunta: «¿Qué quieres, María?». Ella responde: «¡Ahí te va este niño rotito y quebrado, que San Juan y la Virgen lo pongan sano!». La operación se repite, ahora, a la inversa; es decir, de Juan a María, en un acto ininterrumpido que alcanzará las tres veces.
Mientras, y en la otra pareja, Juan ha ido amasando barro y María hilando un cordel en su huso. Ambos, al acabar el rito la primera pareja, se acercan a la caña: Juan la unta con barro y une las aristas, cerrándolas perfectamente María con los lazos del cordel.
Luego, la primera pareja entrega el niño a sus padres, hasta entonces completamente pasivos, y regresan a sus casas. Si la caña reverdece, la criatura sanará. (56)
REZADOS
(Se santiguará continuamente al enfermo sobre la parte afectada, y al final se rezará un Credo). (57)
¡En la cruz murió el Señor,
en la cruz te coso yo!
La mano de María
se junta con la mía.
Así te coso yo,
carne quebrada
abierta o desconectada, pues eso mismo cosió
y descosió el Señor.
San Ildefonso se cayó y su carne se abrió,
su cuerpo se quebró se descosió y se desconectó,
pero la Virgen se lo cosió: carne con carne,
hueso con hueso, nervio con carne,
hueso con nervio, todo se quedó soldado
y él se quedó curado.
¡Así se lo pido yo
que te cosa como lo cosió,
queu mano en la mía
la Virgen María!