Fuente: Amor y Confraternidad
Juan Cruz Sepúlveda
En su cénit de inspiración y fortaleza creadora, dejando la plomada, cuchara y cemento, Maestro Pepe había adquirido una rudimentaria Olivetti y se dedica a aporrear las teclas y a darle forma a su alta carga de sentimientos, se inicia en componer sus métricas, sus versos. Se traslada a La Laguna, contacta con su sobrino Sergio (autor del prólogo) que le da aloja-miento, contacta en La Laguna con una Imprenta Editorial. Allí compuso, maquetó, eligió portada, oyó la rotativa girar y vio su primera obra impresa:
Sendas Floridas en el año 1983, efectuó envíos por doquier, allí donde cultivó amistades. En el 1984 publica su segundo libro dedicado casi exclusivo a su Isla de La Graciosa, Cumbres doradas. La tercera entrega de José Umpiérrez lleva por título Diluvio de rosas editado en 1985 y su cuarta y última obra publicada, Manantial de perlas la efectúa en el 1987. Maestro Pepe se consolida como un poeta romántico en sus poesías, sus textos, sus cartas.
De vuelta en su Mesón natal, sigue escribiendo, reconstruyendo su romántico pasado, escribe y recopila un quinto poemario que entrega en algún departamento municipal para su publicación y es ahora, con la colaboración familiar, la Asociación Cultural «Tías, Foro por la Identidad» y el Ayuntamiento de Tías (Lanzarote) quienes facilitan este alumbramiento póstumo y que ahora tienes en tus manos.
En el año 1991, le comienzan a llegar los primeros reconocimientos, le invitan a que lea el pregón de las fiestas del Carmen en La Graciosa. Luego, le tocaría redactar y leer algunos de los pregones de las fiestas de San Pedro desde el año 1999 hasta el año 2003. En este mismo año recibe el primer reconocimiento público en el VII Encuentro de Música Popular que organiza la Asociación Musical «El Pavón». En 2016, en el transcurso de las fiestas de San Pedro se le haría un «Reconocimiento a su obra literaria», analizada por Hilario Acosta y organizado por la Asociación Cultural «Tías, Foro por La Identidad».
Los últimos días del «Tío Pepe», que fallece a los 96 años el 29 mayo de 2007, los pasa en la tranquilidad de las Cuestas del Mesón, la que siempre fue su casa y acompañado de su familia entre versos, folios e intentando dejar todo su legado escrito en LAS MEMORIAS DE UN TROTAMUNDOS; en ellas, narra de forma pormenorizada sus vivencias hasta los comienzos de la Guerra Civil y ahora, tenemos la suerte de ver publicado, su quinto poemario inédito AMOR Y FRATERNIDAD. Por todo ello: ¡GRACIAS MAESTRO PEPE! ¡CAS HOMBRE!