Los ritmos de construcción arrancan de forma moderada a mediados de los años 60 y 70 con la colmatación de la Urbanización Playa Blanca en los límites de La Tiñosa. Prosiguen con el grupo inversor inglés que levanta el hotel San Antonio y a finales de los 70, con capital alemán, continúan con la construcción del controvertido Apartahotel Playa Grande.
Cuando llegan los años 80 comienza la transformación total de toda la morfología de la línea de costa desde La Tiñosa, Playa Blanca, Punta del Barranquillo, Los Pocillos hasta la playa de Matagorda. Los rápidos procesos de especulación del suelo, las plusvalías y el ritmo frenético de la construcción, ayudados por la fuerte demanda de los turoperadores, llenan de grúas, bloques y cemento la zona, una gran parte sin planificación previa.
La construcción de la costa turística de Tías atrae gran cantidad de personal para todas las obras en ejecución: a finales de la década se estiman en unos 3.000, atraídos por los suculentos salarios que se ofertaban en el sector. Las cuadrillas están compuestas por personal de todas las latitudes y las condiciones laborales tampoco son óptimas, aunque los tiempos de entrega son limitados y abunda el trabajo a destajo. La resultante
de estas dos décadas trepidantes es la ejecución de numerosos planes parciales, más de una docena de hoteles, más de 300 complejos de apartamentos, centros comerciales, bares, restaurantes, lugares de ocio y esparcimiento, centenares de nuevas calles. La puesta en funcionamiento de todos estos nuevos establecimientos provoca la creación de un amplio y nuevo catálogo de empleo hostelero y todo lo concerniente a sus complementos.
La población en este periodo se multiplica: de los 3.000 habitantes a inicios de los 70, se superan ampliamente los 10.000 a finales de los 90. Nuestro municipio se convierte en destino preferente por sus bondades de sol, playas y su estratégica situación. La demanda de empleo es constante, de la Educación General Básica (EGB) se puede optar a un trabajo en el sector servicios sin capacitación. Ésta es facilitada por los cargos intermedios del sector. Esta circunstancia también atrae a personal de otras comunidades, países comunitarios y extracomunitarios. La rapidez del cambio y la falta de previsión ponen en evidencia a todos los servicios públicos: sanidad, educación, transporte, carreteras y evidentemente, la seguridad ciudadana, que afronta nuevos retos desconocidos hasta entonces.
España, en general, vive momentos de incertidumbre al finalizar el ciclo de bonanza económica a finales de los 80 y se prepara para dos grandes eventos mundiales: La Exposición Universal de Sevilla y las Olimpiadas de 1992 en Barcelona. Irremediablemente la crisis de principios de los 90 alcanza al país y se incrementa el paro e irrumpe con fuerza el consumo de estupefacientes. Las zonas turísticas registran un considerable aumento de hechos delictivos, por lo que el Estado refuerza los cuerpos de seguridad.
En Puerto del Carmen se crea el cuartel de la Guardia Civil desde principios de los años 80. El cuartel dispone de trece viviendas de tres dormitorios y oficinas. Desde el principio, este cuartel debe de hacer frente a un gran número de denuncias por delitos, hasta tal punto que se recogen en este puesto más atestados que en otras comandancias de mayor rango en la península.
El Ayuntamiento de Tías, debido al fuerte aumento poblacional, debe comenzar a gestionar suelo para nuevos colegios, centro de salud y otros servicios. Tiene que mejorar las instalaciones municipales e incrementar los efectivos administrativos y operarios municipales. En materia de seguridad, debe acometer un gran esfuerzo para dar respuesta a las nuevas necesidades aparecidas en el primer polo turístico de Lanzarote, Puerto del Carmen.
El dato más significativo del estado de la seguridad en el municipio de Tías lo evidencia que en el periodo comprendido entre el año 1982 y el año 1989 se incorporan 51 nuevos efectivos al cuerpo de la Policía Local de Tías. Esta cantidad se distribuye de la siguiente manera: en 1987 se incorporan 9 agentes, en 1988 se incorporan 10 agentes y en 1989, lo hacen 12. Con todos ellos, que se unen a los «guardias históricos»: Rafael, Fefo y Paco, se llega en ese periodo al mayor número de efectivos de la plantilla con un total de 54 componentes. De esta forma, queda cubierta el desfase en materia de seguridad, por el momento, en el municipio.
La Policía Local de Tías toma la iniciativa por ser un ente autónomo sin depender de otros cuerpos de seguridad. Para ello, realiza un esfuerzo en gestión documental en todos los procedimientos administrativos. Inicialmente recurren a la auxiliar administrativa Orlanda Alvarez para perfilar correcta-mente la documentación. Luego, se van incorporando a esta labor los nuevos guardias con conocimientos en gestión administrativa y normativa local: Juan de León, Ramón Machín y los hermanos Antonio y Pedro Rodríguez.
Poco a poco va tomando forma la unidad administrativa y de atestados y, con mucha voluntad y esfuerzo, pasa a ser una Policía Local de referencia, ganándose la estima y buena valoración por parte de los medios de comunicación y de la sociedad en general. Sin su aportación, la evolución de la zona turística se hubiese resentido.
En el año 1991 el Ayuntamiento de Tías inaugura la nueva Jefatura de la Policía Municipal de Tías, situado en la planta alta de un edificio de dos alturas con las justas dependencias en la parte posterior del edificio consistorial. La Jefatura dispone de una recepción, espacio administrativo, sala de transmisiones, atestados, salón de taquillas y pequeño espacio de esparcimiento entre turnos. Dispone de cuatro calabozos, únicos en la isla (a excepción de los calabozos de la Policía Nacional en Arrecife).
Previamente, conjuntamente a la mejora del cuartel, en el año 1989, el Ayuntamiento no escatima recursos económicos para mejorar el parque móvil de la Policía incorporando tres motocicletas BMW y dos Golf GTI (GC-3849 y 50-AM). La intensa actividad en la zona turística obliga a la Corporación a suscribir el primer leasing para adquirir seis vehículos de la marca OPEL (GC-8648-BD…), cinco coches y un 4X4 en abril de 1994.














